¿De qué va?:
Cuando Sarah Adams se encuentra plenamente asentada en Australia, trata de rehacer su vida tras los daños causados por la guerra. Sin embargo, su cercanía con George Bligh y otros miembros de la familia provoca reacciones en quienes no ven estas relaciones con buenos ojos. Sarah correrá entonces el riesgo de que los secretos más oscuros que había encerrado en su interior salgan a la luz para hundirla como nada antes lo había hecho.
No hace mucho os traje la crítica de la primera temporada de esta serie, y sólo unas horas después me enteré de que la cadena responsable la había cancelado. Es una decisión que nadie entiende, porque la audiencia no era mala y la calidad de esta producción es evidente.
Con este panorama, mi mayor miedo era que el final quedase abierto, ya que se sabía que el guion para una tercera temporada estaba escrito. Parece que los responsables, después de todo, no han querido dejar su serie sin terminar y han cortado de aquí y allá para hacer un desenlace más o menos decente. Digo más o menos porque de cuatro tramas principales, sólo dos tienen un cierre satisfactorio para mí. Una tercera, pese a que puede considerarse cerrada, no me ha gustado nada y perfectamente podría continuarse si se quisiera. Por último, la que tiene que ver con Sarah, la protagonista principal, y su futuro está algo cogida por los pelos, pero se dan las suficientes pinceladas para que sepamos qué va a pasar.
Si alguien me pregunta si la sigo recomendando sabiendo esto, la respuesta es sí, porque, personalmente, esta temporada me ha tenido tan enganchada y en vilo como la anterior, y los misterios y secretos de todos los personajes siguen intensificándose hasta que todo lo que tiene que estallar lo hace por fin.
Creo que casi se pueden observar dos partes algo diferentes: la primera mitad, que sigue el estilo de la temporada anterior, y la segunda mitad, que parece volverse más culebronesca. Con esto no estoy diciendo que sea peor, sólo que se les da más importancia a los amores difíciles y a los elementos melodramáticos.
Pese a lo bien que está rodada esta producción, al maravilloso vestuario y estupendo estilismo, a los bellos paisajes y gran escenografía, lo que más destaco de ella son los personajes. Son tan realistas y su progresión a lo largo de los capítulos es tan veraz que es difícil no meterse de lleno en sus historias y sentirlas con ellos. Gran parte de los protagonistas arrastran un pasado complejo que les lleva a ser lo que son, y cuando los secretos van saliendo a la luz, quienes les rodean deben enfrentarse a ello y decidir cómo manejar algo que no podían ni sospechar.
Por supuesto, Sarah es la reina de los secretos. Por fin descubrimos qué es eso que durante mucho tiempo ha intentado ocultar con tanto celo, y realmente se trata de algo que puede hacer tambalear su vida actual. Sin embargo, no todo lo que Sarah vivió en la guerra y tras ella se resume a eso, ya que es una mujer que oculta mucho más.
Su relación con los Bligh la pone contra las cuerdas de maneras que no esperaba y llega a sacar sus puntos más vulnerables, pero como dije en la reseña de la primera temporada, Sarah es una mujer muy fuerte y luchadora. También sus rivales lo son, aunque ahora se nos va a mostrar mucho juego sucio que tendrá consecuencias para todos.
Para mí, descubrir esta serie ha sido una sorpresa muy grata. La cancelación me fastidió mucho, como a todos los que la seguían, pero al menos hay que agradecer que hayan procurado darle un cierre y que no nos dejasen con un palmo de narices.
El guion trata temas muy delicados, y se ha atrevido a hacerlo en profundidad, desnudando el alma de todos los personajes y mostrando lo cruel e intolerante que pueden llegar a ser la sociedad en su conjunto y el ser humano de forma individual.
Si alguien duda sobre si empezar a verla o no por el tema de la cancelación, yo lo animaría a que lo hiciera. El final, como digo, no es malo, sólo regular en algunos aspectos, y el resto de la serie merece mucho la pena. No creo que nadie se arrepienta por darle una oportunidad.
EDITO PARA AÑADIR ESTA NOTICIA: HAY ESPERANZAS PARA UNA TERCERA TEMPORADA.
Con este panorama, mi mayor miedo era que el final quedase abierto, ya que se sabía que el guion para una tercera temporada estaba escrito. Parece que los responsables, después de todo, no han querido dejar su serie sin terminar y han cortado de aquí y allá para hacer un desenlace más o menos decente. Digo más o menos porque de cuatro tramas principales, sólo dos tienen un cierre satisfactorio para mí. Una tercera, pese a que puede considerarse cerrada, no me ha gustado nada y perfectamente podría continuarse si se quisiera. Por último, la que tiene que ver con Sarah, la protagonista principal, y su futuro está algo cogida por los pelos, pero se dan las suficientes pinceladas para que sepamos qué va a pasar.
Si alguien me pregunta si la sigo recomendando sabiendo esto, la respuesta es sí, porque, personalmente, esta temporada me ha tenido tan enganchada y en vilo como la anterior, y los misterios y secretos de todos los personajes siguen intensificándose hasta que todo lo que tiene que estallar lo hace por fin.
Creo que casi se pueden observar dos partes algo diferentes: la primera mitad, que sigue el estilo de la temporada anterior, y la segunda mitad, que parece volverse más culebronesca. Con esto no estoy diciendo que sea peor, sólo que se les da más importancia a los amores difíciles y a los elementos melodramáticos.
Pese a lo bien que está rodada esta producción, al maravilloso vestuario y estupendo estilismo, a los bellos paisajes y gran escenografía, lo que más destaco de ella son los personajes. Son tan realistas y su progresión a lo largo de los capítulos es tan veraz que es difícil no meterse de lleno en sus historias y sentirlas con ellos. Gran parte de los protagonistas arrastran un pasado complejo que les lleva a ser lo que son, y cuando los secretos van saliendo a la luz, quienes les rodean deben enfrentarse a ello y decidir cómo manejar algo que no podían ni sospechar.
Por supuesto, Sarah es la reina de los secretos. Por fin descubrimos qué es eso que durante mucho tiempo ha intentado ocultar con tanto celo, y realmente se trata de algo que puede hacer tambalear su vida actual. Sin embargo, no todo lo que Sarah vivió en la guerra y tras ella se resume a eso, ya que es una mujer que oculta mucho más.
Su relación con los Bligh la pone contra las cuerdas de maneras que no esperaba y llega a sacar sus puntos más vulnerables, pero como dije en la reseña de la primera temporada, Sarah es una mujer muy fuerte y luchadora. También sus rivales lo son, aunque ahora se nos va a mostrar mucho juego sucio que tendrá consecuencias para todos.
Para mí, descubrir esta serie ha sido una sorpresa muy grata. La cancelación me fastidió mucho, como a todos los que la seguían, pero al menos hay que agradecer que hayan procurado darle un cierre y que no nos dejasen con un palmo de narices.
El guion trata temas muy delicados, y se ha atrevido a hacerlo en profundidad, desnudando el alma de todos los personajes y mostrando lo cruel e intolerante que pueden llegar a ser la sociedad en su conjunto y el ser humano de forma individual.
Si alguien duda sobre si empezar a verla o no por el tema de la cancelación, yo lo animaría a que lo hiciera. El final, como digo, no es malo, sólo regular en algunos aspectos, y el resto de la serie merece mucho la pena. No creo que nadie se arrepienta por darle una oportunidad.
EDITO PARA AÑADIR ESTA NOTICIA: HAY ESPERANZAS PARA UNA TERCERA TEMPORADA.
Puntuación: 4 (sobre 5) |